19 de Marzo 2004
Antes no ahora si
La mera situación en la que estoy actualmente me provoca el sentir melancolía, sobre todo por los tiempos que no regresarán, cuando mi mundo se limitaba a los juegos y a la fastidiosa obligacion escolar, ¿Cuáles problemas? Solo risas y juegos. Solo sentir el sol quemandome lentamente cuando corria por las calles tras mis amigos, solo el habitual miedo a ser descubierto jugando fuera de los limites establecidos por mis padres, que recuerdos! Ibamos dia tras dia a explorar en nuestras bicicletas, o jugabamos tranquilamente en cualquier patio. Solo podiamos reir, y las cosas que nos entristecian entonces eran cosas que ahora nos harian sonreir.
Mientras escribo esto revivo en mi mente viejas glorias, y me dejo llevar al pasado, los juegos, los amigos. Nunca fui de muchas exigencias, ni mis compañeros de juegos ni yo teniamos los ultimos juguetes ni mucho menos, en ese entonces apenas salia el Atari, y la verdad, lo tenia pero no me llenaba igual que andar trepando en los arboles, o cruzando rampas de tierra en la bicicleta. Todos los dias, despues de comer y hacer la tarea, me salia, y no regresaba hasta la hora de la cena y a veces ni eso, sino que mi hermano tenia que salir a buscarme para llevarme a rastras a mi casa. Siempre que podiamos nos ibamos a casa de Papo, que era donde más nos gustaba jugar porque nunca habia nadie y tenia un patio grande, en el cual podiamos jugar desde beisbol hasta carreras en las bicicletas. Después, pues bueno, fuimos creciendo y cada quien sigui su camino. A la mayoria de ellos hace años que no los veo pero espero que se encuentren bien. Y hoy, bueno, tengo otras cosas, pero como la vida es dificil, no se disfrutan igual que en la niñez, cuando no eres tan conciente del mundo que te rodea y lo perdido que esta. Solo queda atesorar nuestros recuerdos, agradezco a la vida y a mi familia la entrañable infancia que tuve, y estoy seguro que siempre, sobre todo en momentos como este en que los problemas parecen superarme, recordaré aquellos tiempos con una sonrisa, que me dará fuerzas para seguir adelante, porque soy de los que piensan que nada es para siempre y que debemos vivir cada dia, a pesar de todo, lo mejor que podamos. El deber ser, a veces es muy pesado y por hoy, lo guardaré hasta el fondo. Ya mañana, DIOS dirá.