Ayer, y despues de bastantes días de querer ver la nueva pelicula dirigida por Mel Gibson, La Pasión de Cristo, pude por fin contar con un momento de tranquilidad para verla.
La verdad, dejando aparte que el señor Gibson comienza a conocer su oficio (el de comerciante, no el de director), la pelicula es en si una recreación más de la pasión, la verdad, salvo la extrema exageración en el hecho de que los mismos sacerdotes fueron los que condenaron a Jesús a su muerte en la cruz, no aporta, según vi, nada nuevo. Lo que si no puedo negar fué la crudeza con la cual está mostrada esta conocida historia. Salvo pequeñas partes (los flashbacks de recuerdos), la película muestra sangre de principio a fin, y una violencia extrema para con Jesús, lo cual, me parece lo más acertado, ya que generalmente uno conoce la historia pero se la imagina de otra forma, ya que parece que como Cristo es el hijo de Dios, no pudieran ser crueles con el.
La verdad, me gustó, me conmovió y toco fibras de mi ser de por si sensible en estos momentos. No la recomiendo para personas que no sean religiosas, o de las religiones neutras (sin ofender), puesto que para ver algo como esto se requiere cierto grado de fé, ya que si no crees que haya pasado, te parecera solo un remix de cualquier pelicula holywodense, solo que hablada raro.
Recomiendo que la vean con cierta cautela, sabiendo que verán algo muy gráfico y conmovedor. Espero que les guste como a mi, pero no les remueva tanto. La vi ayer y todavía me siento, digamos... temblando.